Durabilidad, aislación termo acústica, hermeticidad, seguridad, diseño y tipo de apertura son los puntos que deben evaluarse en el momento de seleccionar las aberturas, uno de los puntos determinantes para el confort de una casa. Al evaluar estos factores y la ecuación entre inversión y amortización, se llega a la conclusión de que las ventanas de aluminio de alta prestación son ideales.
Las aberturas son una elección fundamental para el hogar. Hoy no se puede pensar en ventanas sin tener en cuenta su eficiencia energética, ya que son responsables de hasta el 30 por ciento de las pérdidas y ganancias de calor que deben compensar la calefacción y la refrigeración. Es clave la inversión en ventanas aislantes, y su amortización se logra en pocos años, gracias a los ahorros de consumo en energía eléctrica y gas. Además, se debe pensar en comprar una ventana durable que no requiera mantenimiento a lo largo del tiempo. En esta ecuación, las ventanas de aluminio de alta prestación son ideales. Aquí, las razones.
1. Para siempre: el aluminio es un metal durable por excelencia y logra que las aberturas tengan la más alta performance a lo largo del tiempo. Los cerramientos de aluminio no se corroen ni deterioran, ni los afectan los rayos UV, por lo que el mantenimiento que requieren es prácticamente nulo.
2. Resistentes y de gran tamaño: la tendencia arquitectónica en todo el mundo es diseñar casas con ventanas cada vez más grandes. Por su resistencia estructural, el aluminio es óptimo y, además, se logran marcos esbeltos, generando más caudal de luz y un mejor diseño.
3. Colores y texturas, aliadas del diseño: las ventanas de aluminio ofrecen múltiples recursos para el diseño arquitectónico y la decoración. El aluminio puede ser pintado de infinitos colores lisos, también se pueden elegir pinturas simil madera, anodizados (colores metalizados con amplias gamas de oro, bronce y negro) o darle terminaciones texturadas, con efectos rústicos, minimalistas o tecnológicos.
4. Ahorro de energía térmica: hoy en día debemos considerar como un estándar de exigencia elegir ventanas de alta prestación, que permitan el ahorro de energía a través de la aislación térmica. Adicionalmente, las ventanas de aluminio de alta prestación con doble vidriado hermético –DVH- y ruptura de puente térmico -RPT- logran excelentes resultados de aislación termo acústica. El sistema RPT tiene un material aislante que interrumpe la conducción del calor o del frío entre el exterior e interior.
5. Hermeticidad, con buenos accesorios: el sistema de apertura y cierre otorga a la ventana la cualidad de la hermeticidad y permite aislar la temperatura, así como las filtraciones de aire y agua. Los principales accesorios son los herrajes, bisagras, ruedas, cierres y burletes. El accionamiento de una abertura es aportado fundamentalmente por el herraje y por ello es un aspecto crítico en su calidad.
6. Variedad en tipos de apertura: las ventanas de aluminio tienen las mayores posibilidades de apertura de acuerdo con el movimiento de la hoja, clasificadas en dos grandes grupos: corredizas (horizontal, vertical o corrediza paralela, alzante) y batientes (de abrir, oscilobatiente, ventiluz, libro, banderola o desplazable). Son clave para esta elección la ubicación, el accionamiento, la orientación y el asoleamiento.
7. Seguridad: el aluminio es un metal ignífugo, por lo tanto, en caso de incendio, las aberturas no combustionan ni generan gases tóxicos, como en el caso de otros materiales. Por otro lado, al tener el aluminio un punto de fusión mucho más alto que otros materiales, evita que la ventana se deforme al ser sometida a altas temperaturas. También es muy resistente, ideal para la protección contra robos.
8. Pensar en aluminio es pensar sustentable: el aluminio es cien por cien reciclable, se puede reutilizar infinitas veces, sin que pierda sus cualidades. De hecho, el 70 por ciento del total del aluminio que se ha fabricado en el mundo en sus 125 años de historia industrial sigue actualmente en uso.
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